El castillo de Edimburgo

Es habitual que los visitantes se atemoricen de esta antigua fortaleza en la cima de Castle Rock, una asombrosa formación de tierra creada a partir de un núcleo volcánico. El pico de peñas ha sido habitada desde la edad de bronce (900 a.c.), Mientras que los registros indican el castillo de Edimburgo ha estado en existencia desde el año 600 d.c.
La Antigua Ciudadela desde entonces ha visto los asedios, los ataques, las ocupaciones militares, y los residentes de la realeza. Con la historia de tanta agitación de los que se acercaban, o los que allí se alojaban, no es de extrañar que el castillo de Edimburgo ha sido considerado como el lugar con más actividad paranormal de Escocia.
Según se informa, las almas torturadas desde hace siglos, todavía persisten en el castillo hay muchos salones, salas, y mazmorras. Aquellos que deambulan por los pasajes hoy, suelen dar informes de sensaciones extrañas como una caída repentina de temperatura o la sensación continua de ser observado. 
Algunas experiencias inexplicables de sonidos, se suele escuchar por allí, pero la mazmorra del castillo es la mas llamativa pues tiene un alto grado de actividad paranormal. Innumerables prisioneros han sido encerrados en sus celdas, el sufrimiento, la malnutrición, la tortura y la muerte han sido una insoportable condena. Más de 500 prisioneros franceses fueron retenidos durante siete años y después de la guerra colonial estadounidense cautivos de la guerra revolucionaria americana.
Muchos se han perdido con el tiempo, pero un preso se suele aparecer tal y como se cuenta su historia; desesperado por escapar se enterró a sí mismo en un túmulo de estiércol, lo malo fue que los guardias le encontraron. Entonces, solo por satisfacerse de su muerte y librarse de aquel hedor, lo tiraron por las empinadas laderas rocosas de Castle Rock. Él es conocido por tratar de empujarte por las almenas y por emanar un fuerte olor a excremento.
Pero hay mas casos, durante el siglo 16, Lady Janet Douglas o Lady Glamis fue quemada en la hoguera a sus 16 años de edad por ser acusada de brujería, su hijo estuvo presente sufriendo por ver tan terrible acto. Ella estaba felizmente casada con el 6º Señor de Glamis hasta su muerte en 1528. Por desgracia, el rey James consideró a la familia Glamis, una amenaza para su poder. Una vez que su esposo falleció, el rey james acusó a Lady Glamis de intento de envenenamiento por practicas de brujería. Él torturó y obligó a crear y sostener confesiones falsas a muchos de los sirvientes y familiares de dicha familia, mas tarde se apoderó del castillo Glamis y envió a Lady Glamis a las mazmorras del castillo a la espera de su ejecución. Ella estaba casi ciega por la oscuridad subterránea en el momento en que los guardias la quemaron en la hoguera. Se pueden escuchar a altas horas de la noche, golpes y sonidos parecidos a cuando se resistía a la vez de ser arrastrada y luego asesinada por condena a morir en la hoguera.
Otro foco de actividad es en la calle Royal Mile, este trayecto conduce a través de la ciudad vieja, al castillo de Edimburgo. Por debajo de la Royal Mile son todo cavernas subterráneas y pasadizos, descubiertos por gente del pueblo, hace varios cientos de años atrás. Un gaitero tocando la gaita fue instruido para explorar los túneles. Tocaba una melodía mientras se movía por lo más profundo de las cuevas, de modo que otros podían seguir sus pasos desde arriba.
Entonces, en un punto medio, la música se detuvo abruptamente. Un grupo de rescate fueron a buscar al gaitero, pero no encontraron ni rastro de él. Si escuchas con atención, mientras paseas por el castillo de Edimburgo, puedes escuchar su solitaria gaita tocando desde la calle por algún punto de la fortaleza.
Además de estas inquietantes historias, hay un grupo de menos conocidas figuras espectrales vagando por los terrenos del Castillo. Las leyendas hablan de un baterista sin cabeza desde el siglo 17, un hombre con delantal de cuero que se ha visto caminando a través de una puerta en una de las bóvedas o de incluso perros que no puede descansar tranquilos. Más allá de la entrada del Castillo, los visitantes han visto un perro negro con un brillo místico alrededor de ella. El perro se cree que está enterrado en el cementerio de mascotas por el ejército Garrison.
Las historias paranormales que rodea el castillo de Edimburgo son muchas, tantas que se podría seguir y seguir. Cuanto más se deambula por los pasillos de su interior, más fantasmas se está obligado a percibir.